Queridos amigos, después de unas pequeñas vacaciones de cuatro meses sin escribir, creo que es hora de retomar mi carrera de escritor, (yeah, right!)
Ya pasaron, abril, mayo junio y casi todo julio, perdí buenas oportunidades de contarles acerca de mi abuela Rosita y la recitación que me hizo aprenderme respecto del mes de abril, o los preliminares de las elecciones de mayo, o mi aventura como segundo secretario durante las votaciones del 7 de junio y todas las actas que tuve que redactar ese día, o de cómo hemos vivido la victoria de Jaime «el bronco» Rodríguez en esta parte del país llamada Nuevo León.
He tenido tiempo para armar en mi cabeza uno o dos escritos, que por supuesto ya olvidé. Que le voy a hacer.
También confieso que ando un poco frío, pero espero calentar pronto.
Así que si no les importa y sin más preámbulo, comencemos de nuevo.
Monterrey, N.L. a 24 de julio de 2015.